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No te arrepientas de comprar tu casa
Algunas estadísticas indican que un poco más de la mitad de los encuestados no se arrepintieron al comprar su nueva casa, pero esto deja un porcentaje demasiado alto de aquellos nuevos propietarios que si lo hicieron.
La emoción inicial y la felicidad pueden desvanecerse rápidamente si el comprador comienza a darse cuenta de que su sueño no era como lo pintaron, de que las cosas se complican y comienzan a surgir problemas que antes de la compra estaban ocultos. Estas son las causas principales de arrepentimiento de los nuevos compradores:
- Falta de espacio. O sobra de este. Tan incómodo puede ser que la casa se quede pequeña como que sea tan grande que no puedas mantenerla. El tamaño está directamente asociado con el precio, no sólo de la compra, sino también de los suministros, limpieza, tasas...
- Localización: una buena ubicación para que cubra todas tus necesidades. Piensa en lo que tú y tu familia podéis necesitar en vuestros momentos de ocio y de vida cotidiana. Lo que puede valer a otros no tiene porque servirte a ti.
- Luz y zonas exteriores: sentirte encerrado en tu casa, sin espacios exteriores, ventanas pequeñas sin entrada de luz natural... sentimiento de ahogo en tu propia casa.
- Ruidos: aquí encontramos factores como los vecinos, industrias, hostelería... valora si tu casa está bien aislada y si los ruidos del entorno serán un problema.
- Gastos: asociados a la compra, a la hipoteca, tasas... que tu economía te permita vivir y asumirlos cómodamente.
- Estado del inmueble: si es de segunda mano y con muchos años, seguramente necesite reformas o tenga defectos ocultos.
En previsión de todo esto, el equipo de Urmosa ha desarrollado el servicio Try Before you Buy, para que puedas valorar si esa casa que tanto te gusta es la que de verdad estás buscando. Las visitas habituales a una vivienda en venta no suelen sobrepasar los 30 minutos, tiempo insuficiente para comprobar todos los factores antes mencionados.
El servicio exclusivo TBYB permite al comprador alojarse en la vivienda hasta 3 noches, para así poder hacerse una idea real de cómo sería la vida en su nueva casa. Conocer a los vecinos, visitar el entorno e interactuar con él, recorrer los alrededores, usar los servicios del residencial... son actuaciones claves para estar plenamente convencidos y que el sueño de adquirir tu casa tenga un final feliz.
